Minirrelatos
Se dice que lo bueno si breve, dos veces bueno. Autores de cuentos como el guatemalteco Augusto Monterroso o el mexicano Luis Felipe Lomelí han llevado a la máxima este dicho jugando con conseguir el relato más breve escrito en lengua castellana.
Hasta el 2005, Augusto Monterroso ostentaba ese título con su microrrelato “El dinosaurio” que dice así:
“Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí”
En ese mismo año, Luis Felipe Lomelí condensó en unas cuantas palabras menos el sugerente cuento “El emigrante”:
“- ¿Olvida usted algo?
- Ojalá-“
Con estas dos propuestas, os invitamos a crear vuestros propios relatos, de manera que acaben con uno de estos dos cuentos. Seguro que cuando los escuchamos, sobreentendemos que detrás ha habido una historia. Así, este ejercicio consiste en escribir la historia previa al cuento.
Desde aquí, lanzo yo mi historia personal:
"La máquina del tiempo": El paquete llegó a la hora. tras la puerta, el cartero aguardaba con impaciencia para entregarle aquella pequeña caja. Ansioso se lo arrebató y sin dar tiempo a separar la cinta adhesiva, rompió el material que lo envolvía desnudando aquella cajita de colores.
Despegó las solapas y sin leer instrucción alguna apretó el botón. Todo comenzó a girar hasta el punto del mareo. Aterrizó al poco en tierra llana. Hacía frío, a pesar de estar rebozado en el horrendo jersey de lana que le hizo su abuela. El suelo retumbó una y otra vez, cada vez más y más fuerte y rápido, hasta que una enorme mola frenó a pocos metros de él. Un reptil gigantesco que le observaba nervioso desde más de 20 metros por encima de su cabeza, hizo que le temblase hasta el más pequeño de sus músculos. Tembloroso, apretó de nuevo el botón a ver el nuevo destino que le deparaba el aparato...
Aparecó en un profundo sueño, arropado, sin frío, descansado y relajado. Abrió los ojos, pero toda aquella agradable sensación se esfumó: ¡¡¡¡¡¡Cuando despertó, el dinosaurio todavía esta allí!!!!!. (Laura Castiella)
18 comentarios
Laura -
PD: por cierto, eso equipo del que habla Chicho... yo creo que estás confundido... acaso no te has enterado que el único equipo capaz de llevarse todos los trofeos del año es el BarÇa (jajajaja). Saludos
Ada -
naxo -
todos los problemas, el 17 y
20, y el de lengua y dale al coco
e jugado a la play estation 2
al gta uno de matar ente
naxo -
lagos del norte una niña
descubrio de pronto queviva
.Elasonrodel mundo le abrio
.y una de la maana ,mientras
y la atrapo y a la cria icieron ala planccha y la culebra selaconmio
naxo -
carmela -
A mi me gusta leer
Porque te hace aprender.
Leer es sentimiento,
Leer no es aburrimiento,
Leer es diversión
Y comprensión.
Para saber leer te tiene que gustar
Porque así puedes disfrutar,
Porque si no te gusta leer
Poco vas a aprender.
¿Qué es leeR?
Leer es cOmprensión,
Leer es disfrutAr,
Leer es Libertad,
Leer es Diversión.
De la lectura
A la escritura,
Hay poca diferencia,
La palabra.
Carmela Gerosa Cisneros.
Mariano Coronas -
Un abrazo
Mapi y daniel -
sandra -
Hubo una vez un dinosaurio que era muy viejo, vivía en una laguna, todos los días se echaba la siesta en las orillas. Día tras día se sentía más solo, entonces decidió ir una noche a una discoteca del bosque. Entró en la discoteca, y se echó una novia dinosaurio.
El estaba muy feliz, día tras día iban quedando para verse y cada día se echaban más de menos.
Después de 5 meses se fueron a vivir a la laguna negra (la casa del dinosaurio).
Estaban los dos muy felices viviendo juntos hasta que un día el dinosaurio le pregunto:
¿Dónde viven tus padres? Y ella le dijo que estaba muy cansada que se lo contaría mañana porque la historia era muy larga y entonces el dinosaurio le dijo que se fuera de casa porque no sabía nada de ella, se echó a dormir y la dinosaurio se quedó recogiendo sus cosas.
A la mañana siguiente el dinosaurio se despertó y el dinosaurio todavía estaba allí.
gabriel -
Hubo una vez un dinosaurio que vivía muy lejano de aquí.
Estaba solo con otro dinosaurio. Cuando se fue a dormir al día siguiente cuando despertó el dinosaurio aún estaba allí
laro -
Había un niño que quería todo y sus padres, lo que le pedía se lo compraban. Un día le pidió un dinosaurio de robot y se lo compraron.
El niño se puso a jugar con él y como con todos, se olvidó de él y lo dejó en su armario.
Al día siguiente, estaba en su cama y lo guardó en el armario.
Al día siguiente, cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí.
Narciso -
Había un niño que su juguete preferido era un dinosaurio. Y un día se porto mal su madre le quito el dinosaurio. El niño quería tanto al dinosaurio que cuando desperto el dinosaurio todavía estaba hay.
Autor:Augusto monterroso y Narciso Solana
ada -
Era un señor muy creído y siempre se olvidaba las cosas. Cuando alguien le decía algo que le podía ofender, se hacía mas creído aún .Un día cuando se iba del trabajo, su jefe vio que se olvidaba el maletín , el señor creído se iba tan tranquilo , y el jefe le dijo
- ¿Olvida usted algo?-
- Ojala - .
tzunun pro skater :D -
Una vez en un mundo donde no se podía deshacer de nada un hombrecito se quería deshacer de su coche y decidió ir a otro mundo donde se podía deshacer de todo y entonces cuando se fue en el astro ultra nave espacial le pregunto un pasajero del mismo mundo olvida usted algo? ojala
jara -
Sube las maletas al camión que nos vamos-
Y sin decir nada, el emigrante subió las 10 maletas que había,
Y se subió al camión con el comandante y 3 hombres más.
Llegaron a un bosque donde habían escondido la maquina del tiempo. ¿Sabes dónde está la maquina del tiempo? dijo el comandante, al emigrante, el emigrante asintió y le señaló un hueco gracias- respondió el comandante y fue al hueco que le había señalado. Allí excavó un poco y la encontró; se agarraron los 5 hombres y sin saber cómo desaparecieron.
Llegaron a una selva donde estamos- preguntó el comandante. Antes de que el emigrante le pudiera responder vio a un dinosaurio
-vale ya tengo la respuesta, hemos viajado en el tiempo 3000 años corrieron y corrieron para que el dinosaurio no les alcanzara. Llegaron a un árbol, se subieron a el, y estuvieron hablando sobre qué tenían que hacer. Al final decidieron bajar del árbol y ver cómo era de grande el dinosaurio. Cuando vieron que no podían hacer nada volvieron a subir al árbol y pensaron que sería todo una pesadilla así que buscaron un rio para echarse una hoja gigante de plátano repleta de agua se la echaron y no paso nada más que mojarse a quién se le habrá ocurrido esto del agua-dijo el comandante ha sido usted señor al que se le a ocurrido lo del agua- dijo uno de los dos hombres.
Se estaba haciendo de noche y decidieron irse a dormir que mañana se aclararía todo. Cuando despertó el dinosaurio todavía estaba allí.
maria -
Una señora fue a la tienda y no compró nada. Después de un minuto volvió, pero tampoco compró nada. Después llegó a casa y mandó a su marido a la tienda. El señor se la quedó mirando y volvió al minuto disfrazado para entrar a robar. La dependienta de la tienda le miró y le preguntó:
- ¿Olvida usted algo?-.
- Ojalá -.
María Gazdac y Luis Felipe
carmela -
Había una vez un motorista que se le volcó la moto en una curva justo la antepenúltima para llegar al final y se rompió una pierna. Lo ingresaron en el hospital y ya no pudo competir hasta pasado un año. Cuando comenzó a competir todos y cada uno de sus aficionados fueron al circuito para darle la bienvenida. Todos gritaban para que les oyera pero el tenía que competir y no podía atender a la gente. También acudió al circuito el periodista Carlos Carnicero el que entrevistó al motorista con mucho entusiasmo.
-¿olvida usted algo?-
-ojala-
Casbetas -
Estaba un día un Anciano llamado José Ignacio trabajando.
Cuando a final de mes término le dieron el dinero que ese merecía, mil euros nada más y nada menos. Por la tarde le gustaba y al parque a sentarse en un banco y ver a los niños jugar. Siempre los invitaba a un helado como todas las tardes fue al chiringito de siempre pero algo raro pasaba cuando se metió la mano en el bolsillo no estaban los mil euros, dijo: que cosa tan rara juraría que estaban en mi bolsillo pero no le dio importancia por que se pensó que estaba donde el trabaja y siguió sentado en el banco viendo a los niños. Cuando llegó a casa hizo como todas las noches, estar en casa cenando y luego echarse a dormir, pero el anciano José Ignacio era muy despistado y al día siguiente no se acordaba de nada entonces llegó al trabajo y ya no se acordaba de nada y le dijo su compañero
- ¿Olvida usted algo? -
- Ojala -